En México y Latinoamérica los Departamentos de Ingeniería Biomédica (DIB) surgen ante la necesidad de gestionar el equipo médico desde la planeación y su disponibilidad dentro de los hospitales. Hoy en día es clave para la toma de decisiones en hospitales a nivel directivo, ya que se encargan del uso eficiente y seguro de las tecnologías en salud y estas son fundamentales en cualquier establecimiento que provee atención a la salud.

En el sector salud concurren diversos factores, que de no ser manejados en forma adecuada, suelen provocar problemas graves con repercusiones clínicas, éticas, legales y económicas. Actualmente, la seguridad de los pacientes es un tema relevante para organismos internacionales que promueven la salud de la población, ya que ha impulsado a cambios en la normatividad sanitaria y en prácticas asistenciales. La atención a la salud es una actividad, por naturaleza, compleja y de alto riesgo ya que no existe forma de garantizar procesos humanos perfectos y tampoco de eliminar eventos adversos; esta actividad es una combinación de factores inherentes al sistema con actos humanos individuales. 

La necesidad de evaluar y contratar servicios externos de mantenimiento especializado surge de la complejidad tecnológica que presenta el equipo médico disponible en instituciones de salud, en las que la gestión de equipo médico tiene como objetivo proveer y evaluar la tecnología eficazmente. Este proceso involucra la detección de necesidades, planeación, evaluación, adquisición, instalación, mantenimiento, entre otras.